De experiencias pasadas probé lo dulce y lo amargo. De lo bueno disfruté y de lo malo aprendí. No temo seguir equivocándome, porque he aprendido mucho; acerca de mí y sobretodo del resto. Tampoco le temo a sucumbir a ciertos placeres que me han dado bienestares momentáneos, y de los cuales también me ha servido errar. Ni menos temo a aquellos personajes malévolos, que como hienas se acercan entre risa y juegos a probar lo que más tarde dejarán de lado... pero, lo que sí realmente temo es a la huella profunda que cada experiencia va dejando, remarcándose ineludiblemente con el tiempo, y que, probablemente me haga cada vez más indolente como aquellas hienas salvajes.
No pretendo endurecer el corazón, ni sufrir por lo que no lo merece, ni menos desquitarme con inocentes por alguna mala racha mía... Sólo quiero seguir siendo siempre. Ser. Con la cruz que cargo a la espalda y la luz que me guía en el camino; con mis virtudes, defectos y prejuicios...
Ser.
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De eso debo aprender, de personas como Tú..
ResponderEliminara perder el miedo a caer y volver a levantarse una y otra vez, lo he hecho muchas veces, pero me da miedo equivocarme.. creo que me hace falta arriesgarme más por la vida
Ahhh se me olvidaba decirte, te quiero mi amiga!.. ojala hablemos un día porque no me siento bien :(
ResponderEliminaradios
Mientras que no dejes de exprimirle el jugo a la vida, de dusfrutar de sus bondades y aprender de las malas experiencias, creo que seguira siendo siempre tú misma.
ResponderEliminarCon más lecciones encima, eso sí.
Ser y vivir, eso es lo más importante, no hay que rendirse nunca y por supuesto aprender de lo que vivimos.
ResponderEliminarEs la única manera que conozco de avanzar
(Y)
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